martes, 18 de agosto de 2009

TMB Día 3: Refugio de la Balme - Refugio de Mottets

Era nuestro tercer día en el TMB, y era un día emocionante, íbamos a pasar por 2 lugares con leyenda, el Col del Bonhomme y el de la Croix del Bonhomme, además, dejamos el sur por el paso des Fours y ya nos vamos hacía el este en busca de Italia. Seran unas 6 o 7 horas con un desnivel de 1100 mts positivos y negativos, y por cosas de la vida, no lo haríamos solos.

Habíamos compartido noche con una pareja de franceses y un australiano solitario, Geoff. Todo empezó cuando el hombre no encontraba una caja de pastillitas, empezamos a charlar y nos dijo que, si no nos importaba que nos acompañara en la ruta. Con ese inglés malo que tenemos...veremos a ver como acabamos...je je



Preparados!

Ya vamos dejando de lado las impresionantes y muy descascarilladas Aiguilles de la Pennaz para coger un sendero a la izquierda que nos lleva hacía el Col du Bonhomme. Seguimos en constante pendiente hasta cruzar un pequeño puente y pronto llegamos a un túmulo de rocas (Plan de Dames, 2.040 mts). 

Según se cuenta, en el túmulo están enterradas una gran señora y su criada, que perecieron en ese sitio envueltas por un golpe de viento a su vuelta de Italia...aunque otra leyenda cuenta que hay enterrada debajo de las piedras una estatua de Mercurio (protector de mercaderes y viajeros), por eso hay que poner una piedra, para invocar la protección de Mercurio..total, que hasta el australiano puso una piedra.



Cogiendo el sendero

Con Geoff en Plan de Dames

Aquí no hay perdida, solo hay que seguir subiendo siguiendo las marcas del GR5 hacia el col, las mochilas empiezan a pesar bastante ya que el desnivel es constante. En poco rato llegamos al Col du Bonhomme (2.329 mts). 

La verdad,con tantas advertencias que hemos leído sobre este paso, pues, nos parecen exageradas, imaginamos que como siempre en montaña, con mal tiempo y viento puede ser duro, pero ahora, nos parece un paso chulísimo, para disfrutar las vistas.



Subiendo a buen ritmo

Venimos del fondo...

En el Col del Bonhomme

En el col giramos a la izquierda, ya empezamos a ir en dirección este, y seguimos subiendo distraídos por las marmotas que aparecen, por las vistas y por la dureza de la subida. Hay que llegar a otro col, el de la Croix du Bonhomme, tardamos unos 45 min mas o menos, aquí se encuentra el refugio mas alto del TMB, con 2.433 mts.



Marmotas


Sigue la subida

En otro Col, el de la Croix du Bonhomme

También hay una tabla de orientación donde paramos a tomar un refrigerio. Aquí hay un par de opciones de ruta, esta vez decidimos subir por el sitio mas duro, giramos a la izquierda para seguir subiendo hacia el col des Fours (2.666 mts).



Vista del refugio mas alto del TMB

Tomando un refrigerio y ¿charlando?

Vistas desde el camino

Al llegar al col des Fours hay una opción de subir un pico, la Tête Nord des Fours (2.756 mts), dejamos las mochilas en el cruce y en 20 minutos estábamos en lo alto. Este sería el punto mas alto de nuestro TMB, las vistas hacia el Mont Blanc y la parte sur eran espectaculares! 



Felices en lo alto

Admirando el paisaje

Genial!

Ya habíamos hecho casi toda la subida del día, así que solo nos quedaba bajar, pero que bajada! Es un sendero que en zigzag baja a través de una glera perdiendo altura rápidamente. Hay que llevarlo un buen rato, cruzando torrentes, y viendo hitos en lugares extraños.



Bajando por una glera

Y se sujeta....

En un par de horas de destrozarte las uñas frenando, llegas a las casas de Turf (1.993 mts), donde el sendero se convierte en una pista con un montón de revueltas interminables, además que, es imposible atrochar por ningún lado, una pesadilla.

Al final de la pista te encuentras con el caserío de la Ville des Glaciers (1.789 mts) que ni es villa, ni tiene glaciares. Aquí se enlaza con otra pista que en poquito rato te deja en el refugio des Mottets (1.870 mts)



Llegando al refugio, por fin!

Nuestra habitación


El sitio es muy animado, ya te encuentras gente que te has ido cruzando estos días y la emoción que te da empezar a tomar rumbo norte y pasar a Italia hacen que sea una noche muy agradable, en muy buena compañía.


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